• Artículo originalmente publicado el 15 de Octubre del 2019 por Ad Smokin' Style (Adhemar).

    Los últimos recuerdos que tenemos del siglo XX, y que siguen latentes hoy en día, es de la fiebre de las mascotas virtuales. Aún si no lo tuviste, habrás escuchado o visto los Tamagotchi, esos juguetes LCD en el que debías criar a un animal y estar junto a él desde su nacimiento hasta sus últimos días, siempre intentando hacer lo mejor para que viva de la forma más saludable posible . Esto era muy popular entre los chicos que siempre deseaban tener un perro o gato, pero por distintas cuestiones les era imposible conseguirlo. Les salia más económico tener esta clase juegos, que incluso se podía usar de llavero para así creer que le estaban llevando de la correa. Los adultos también disfrutaban de estos productos, ya que ayudaban a distraerse durante sus largos ratos lejos de casa.

    Los mismos creadores del Tamagotchi quisieron llevar sus mascotas a algo más “radical”, orientado a los chicos noventeros y dejándose llevar por la estética de cómic americano para crear los nuevos animales. Ahora los criamos no solo para que sean felices y saludables; ahora los entrenamos para que sean maquinas asesinas y así destruir otras mascotas. Así fue cómo se desarrolló la secuela espiritual, llamada “Digital Monster”, Digimon para abreviar; un Tamagotchi competitivo.

    El resto es historia. Ya todos conocemos sus adaptaciones animadas, y gracias a este artículo se les ha orientado más o menos cómo va la franquicia en términos generales. Y cómo había dicho en ese, estaba preparando un análisis del primer Digimon World, y están a un par de lineas de leerlo. Así que sin más dilación, que esto va para largo, desentrañemos esta obra nacida en la primera PlayStation a ver qué nos tiene para contar.

    Un poco de contexto

    Ante todo, debemos aclarar que este no es el primer videojuego de la franquicia. Un año antes de que saliera Digimon World, estaba Digital Monster Ver. S: Digimon Tamers, para Sega Saturn. Tanto Ver. S como World tenían la premisa de adaptar el juego de mascotas virtuales a las consolas de sobremesa. En el primer caso, se puede apreciar que la transición llega a ser muy literal, poniéndonos en contexto que ahora usamos una PC y podemos criar a más de un monstruo, además de poder navegar en internet y leer correos, pero más allá de eso no había muchos cambios con respecto a la mecánica principal de criar, solo lo volvieron mas diverso en cuanto a las opciones de comida y entrenamiento que puedes tener y poco más.

    Digital Monster Ver. S: Digimon Tamers. Acá se muestra que el entrenamiento, la tienda, la comida e incluso el baño (graficado como un tacho de basura) estaba al alcance directo del cursor.

    Tomando a World como una secuela espiritual del concepto de lo que quería hacer Ver. S, este agarró las novedades del juego anteriormente mencionado y lo expandió a niveles inconcebibles. En primer lugar, ya no estás en una computadora monitoreando todo lo que hace tu Digimon en el mundo digital, sino que ahora estás en dicho mundo y puedes explorar todo lo que se te dé la gana. Esto hace que las opciones que veías en computadora y se encontraban al alcance de un par de clics ahora tengan mayor peso al momento de realizarlas, pues tendrás que ir a pata a buscar tus provisiones, pelear, criar a tu bicho en distintos lugares. Incluso las opciones de internet, como comprar cosas en la tienda virtual, sean ahora locales físicos en los que vos debes encontrar y comprar personalmente. También se tomó en cuenta la nueva forma de entrenar a los digis, que sea usar estadísticas y diferentes equipos de entrenar (ya que originalmente en los v-pets solo existía un stat de fuerza). Y claro, no hace falta aclarar la evolución gráfica y la cantidad de nuevos digis a conocer.


    Ahora sabiendo que World es el segundo intento de la franquicia en trasladar el sistema de los juguetes virtuales a las consolas ¿Qué tan grande es el cambio?

    Introducción

    El juego nos abre con una cinemática en la que, en bruto, vemos una pelea entre Metal Greymon y Metal Mamemon, donde el protagonista del juego es un observador. Esta apertura nos muestra, además del CGI de dos pesos, cómo juegan con el virtual pet y algunos conceptos como el de crecer al monstruo y las peleas, que si bien nosotros solo vemos unos pixeles animados, dentro del hardware hay un mundo gigante en el que estas dos bestias intercambian golpes, levantándose la tierra por el poder de las pisadas del Metal Greymon y, entre los escombros, se muestra el titulo del juego, Digimon World.
    Toda la escena en CGI cumple bastante en representar lo que había dicho anteriormente sobre los V-Pets y su funcionalidad en combate, con un grupo de pibes jugando en la plaza, y el paralelismo entre ver una batalla en la vida real y en el mundo digital. No es que fuese súper trascendente la introducción del juego, pero cumple con su función de mostrarnos el concepto básico de la franquicia y como se solía jugar.


    Al empezar una nueva partida, se nos aparece un personaje llamado Jijimon, el cual sirve como interfaz para personalizar nuestro personaje a modo de cuestionario. En sí, el protagonista siempre será el mismo ya que no es un avatar sin personalidad, y solo tenemos la libertad de darle un nombre. En cuanto al Digimon, además de su dichoso nombre, tendremos una pregunta bastante especial que dependiendo de nuestra respuesta se ramifican en otras dos preguntas posibles, y este dará resultado al Digimon que empezarás tu aventura, Agumon o Gabumon.


    La primera pregunta es “Tienes un Digivice?”. En el anime, Digivice es un dispositivo que usualmente utilizan para evolucionar al Digimon. Dependiendo del anime tienen más funciones, pero la principal es la ya mencionada. Pero sabiendo que Jijimon le habla al espectador, seguramente se refiere al juguete, y si vemos la versión japonesa en efecto se refiere al V-Pet, llamándolo “Digital Monster” que es justamente el nombre de la primera generación de productos. Esta pregunta no está por nada, ya que en base a lo que respondas Jijimon sabrá si tuviste experiencia con algo de la franquicia en cuanto al V-pet se refiere.

    Si respondes que sí, la siguiente pregunta que te hará es si te gusta el día o la noche. La primera te dará a Agumon, mientras que la otra tendrás a Gabumon. Esto es una alusión a los horarios de actividad que tenían ambos monstruos en sus respectivos juguetes, e implicando que no mentiste en tu respuesta deberías saber este detalle, y estarías eligiendo con probabilidad al monstruo con el que deseas empezar.


    Ahora, si dijiste que no tienes un Digivice, te hará otra pregunta, que es si tienes amigos o no. Nuevamente, dependiendo de lo que respondas tendrás uno de los dos bichos mencionados. Esta pregunta está ligada a tu actividad social, y más allá de que parezca algo incomoda, sirve para que el juego te de un Digi que se acomode a dicho estatus. Esto tiene sentido ya que, si le decimos que no tenemos amigos, nos darán el Gabumon, y tanto en su perfil oficial como en diversas cartas siempre han remarcado su personalidad tímida y asocial.

    Mas allá de que tienen sus propias evoluciones, la única diferencia notable serán los horarios de actividad y sus ataques, pero de resto llegan a ser muy parejos en parámetros y no es realmente un selector oculto de dificultad, simplemente ambos tienen pros y contras que los vuelven parejos y por ende el desafío recae en cómo entrenar a cada uno.


    Luego del cuestionario, entrará otra cinemática la cual vemos al protagonista en su casa, y misteriosamente es tragado por su V-pet, despertando en el mundo digital. Luego de una larga charla, nos enteramos que en donde despertamos se llama File City, una ciudad en la que estaba poblado de digimons pero recientemente varios comenzaron a comportarse de forma errática , perdiendo la capacidad del habla y juicio, y poco a poco empezaron a abandonar el lugar. La misión que te encomienda Jijimon es que intentes recapacitar a estos y que vengan a la ciudad, para que así recupere su prosperidad, aparte de recolectar información del desastre que está sucediendo.

    Lo interesante de esta introducción es que caracteriza de una forma particular al protagonista. Si bien el nombre lo ponemos nosotros, este no es un avatar, y nos lo deja bien claro en el dialogo que tenemos con Jijimon. Quizás no se llegue a acentuar mucho en la versión en inglés, pero el protagonista denota un carácter burlón, mentiroso y hasta despistado. Dice ser un experto cuidando digimons pero su nivel de Tamer, que indica qué tanto sabes de la crianza de un monstruo, no es siquiera 1, es CERO. Para colmo, él llega a retirarse de la casa de Jijimon sin dejar que este termine su discurso. Resulta muy curioso esto, ya que cuanto mas avances en el juego, nuestro personaje se volverá mucho mas centrado en su objetivo y, al terminar el juego, ya tiene un conocimiento base del mundo y de cómo funciona. Más o menos como quedaríamos nosotros al acabar el mismo, ya que es una alusión a que nosotros crecimos y aprendimos con él.


    Cuando tengamos el control de nuestro personaje, podemos ver el estado deplorable del lugar. El banco que tenemos al lado está destrozado, el baño no está muy cuidado que digamos, la plaza está completamente vacía y los recursos escasean. Lo único que podemos hacer es entrenar, conseguir carne (aunque solo 3 veces al día por, nuevamente, la escasez de recursos) y hablar con los habitantes, que la gran mayoría te darán información básica del sistema y uno solo te dará un kit de supervivencia, que a lo mucho te servirá para tus primeros contrincantes y luego queda a tu suerte buscar recursos en otras areas o reclutando nuevos Digimon.

    Explorando la Isla File

    Como nos ha dicho Jijimon, debemos explorar toda la isla para encontrarnos con los digis que estaban antes en la ciudad y debido a la anomalía se fueron distanciando o descubrir nuevos individuos que puedan ser de ayuda en el resurgimiento del lugar.
    El primero con el que nos encontraremos será un Agumon, que sirve de tutorial para lo que será en la mayoría de los casos nuestra rutina: encontrarnos con los bichos, pelear con ellos, y al ganar se nos unirá a la ciudad. Esto se hará por lo general con los digis que tienen lavado el cerebro y, de una forma bruta, le tendremos que “mover el coco” para que recuperen su juicio. Pero no siempre te encontrarás con monstruos sin conciencia, de hecho en cierto punto sentí que estos eran la minoría y se relegaban a enemigos comunes. Puede llegar un caso con que luches con Greymon, que te está poniendo a prueba para ver si eres capaz de ayudar a la ciudad, y si pierdes contra él tendrás que darle la tutela. Otro caso seria de Meramon, que no perdió el sentido común por la anomalía que se está esparciendo sino porque, debido a que este mismo no llega a comprender la situación, se desespera y no puede controlar su propio poder. Tampoco nos podemos olvidar de Gabumon o Palmon, que estos se intentan esconder del peligro y como te perciben como amenaza estos no reaccionan solidariamente, el primero intentando atacar desesperadamente para que no le hagas daño y el segundo te intenta ignorar como si fuera parte del escenario así lo dejes de molestar.


    Aún así, no todo el juego se basa en que luches con los monstruos para reclutarlos: hay un puñado bastante grande en el que requerirás de otros métodos. Hay algunos que llegan a estar bastante regalados, simplemente teniendo que hablarles, como es el caso de Sukamon o Betamon, pero hay bastantes que llegan a ser incluso arcos enteros en los que pueden conglomerar de más de un Digimon. Para dar de ejemplo a uno ya mencionado, el reclutamiento de Meramon se tiene que pasar primero con una pelea contra Drimogemon para que vuelva en sí, luego este te comentará que el calor de la mina no es normal y debes investigar el caso, lo que conlleva a que te encuentres un segundo Drimogemon que está minando. Ahí podrías ayudarlo a sacar la tierra para afuera (que te recompensará con dinero y una subida de stats) para que termine con su trabajo mas rápido o esperar a que él lo haga solo (cincos días in-game), volver y enterarte que hay una roca a la que el monstruo no puede taladrar, así que necesitas si o si un Digimon de nivel Champion para que lo pueda mover, entras y te encuentras con el Meramon haciendo desastres. Lo que es más, si investigas más la zona te encontrarás con un tercer Drimogemon que abrirá un atajo a Gear Savanna, y cuando lo abra lo podrás reclutar hablándole.


    Uno más complejo lo verás en Factorial Town, en el que te encontrarás con un Numemon que está padeciendo por el mal olor de las cloacas, vas al sistema administrativo que lo coordina un Andromon y te enteras que la gestión de las cloacas lo maneja un Digimon, suponiendo que también está lavado del cerebro, intentas entrar a la zona de trabajo pero son custodiados por un par de Guardromons, que te mencionan un horario fijo de descanso, lo que podes aprovechar para poder entrar sin que te molesten, pasas por unos cuartos y llegas al Digimon en cuestión (Giromon) y demuestras que tus teorías eran ciertas, lo derrotas y queda inconsciente, vuelves con Andromon, este se disculpa, cierra las cloacas y ahí vuelves con el Numemon.


    También tienes arcos especiales algo mas cortos pero llegan a ser mas que nada temáticos y se pueden entender como minijuegos, como es el caso del reclutamiento de Monochromon que tiene una tienda y debes regatear precios con los clientes y llegar al final de tu turno con cierta cantidad de ingresos, o la quest de Penguinmon que es básicamente una partida de curling, o bien el puzzle de Centarumon que debes pasar por un laberinto de Amidakuji, un rompecabezas oriental.


    Hay más de 50 digimons a reclutar, y me he dejado varios en el tintero porque hay muchos, muchos monstruos interesantes ya sea por términos de lore, combate, desarrollo, etcétera. Por lo general, se dice que Digimon World carece de historia a nivel general, ya que lo que vemos son simplemente mini historias de cada monstruo que nos topamos y “volvemos” al foco de derrotar al villano solo al final del juego. Pero no hay que negar que el juego hace un trabajo excelente en representar el mundo caotico en el que se vive, con individuos que sienten que ya no pueden confiar en nadie y deciden aislarse de cualquier contacto, otros deciden crear bandas de criminales como si fuera Mad Max, algunos simplemente caen en la locura por todos los desastres que andan sucediendo, las computadoras e IAs empiezan a fallar, entre otras cosas. Esto crea un contexto muy copado del daño que está causando el antagonista, y si hablamos con ciertos NPCs como Cherrymon o Andromon nos enteraremos de más cosas del mundo antes de su aparición, lo cual existe un transfondo incluso. Como siempre, si la idea es querer saber, hay que explorar e investigar, porque al final termina siendo lo mismo si te salteas las cinemáticas de un juego de Sony, terminas siendo vos al que poco le importa.


    Pero bueno, creo que ya se ha dejado muy en claro el punto de que estos monstruos no son para nada unos modelos 3d sin personalidad y que son parte de la fortaleza del mundo para poder creer que están en un verdadero peligro. Pero… qué pasa cuando vienen a la ciudad?

    Prosperidad y Cambios.

    Como se ha dicho anteriormente, empiezas la aventura con muy pocos recursos, y si no logras ningún progreso lo más probable es que solo te alimentes de los hongos o te suministres de las maquinas expendedoras que hay en la isla. Si vuelves a hablar con Jijimon al principio de tu aventura, este te dirá que es posible que algunos digimons que reclutes te proporcionen mejoras en la misma ciudad que servirán para ayudarse entre ellos y contribuir con sus conocimientos o artilugios con vos.

    El primer cambio que verás será el estético. Como se dijo en el anterior tópico, el lugar se siente vacío y con apenas lugares de los cuales interactuar más allá de la granja de carne, el gimnasio, la propia casa de Jijimon y los npcs. Tomando en cuenta a solo los digis que reclutas en Native Forest, Agumon reparará el banco, Palmon mejorará la granja, Kunemon abrirá un atajo para que puedas ir directo a Tropical Jungle sin necesidad de dar toda la vuelta, Coelamon abrirá una tienda de ítems, Meramon construirá un restaurante y Drimogemon se pondrá un comercio de arqueología para buscar ítems raros. Y eso es apenas el 9% de prosperidad, y eso te dice que este sitio aún le falta DEMASIADO para ser lo que una vez fue.

    La primera imagen es cómo se ve la parte norte de la ciudad en el primer momento duel juego. La segunda es cuando se recluta a Vegiemon y a Palmon y la tercera cuando se unen Whamon, Birdramon y Angemon.

    Ahora, no siempre verás cambios tan significativos, al menos estéticamente hablando. No todos los digimons se enfocarán en fabricar nuevos puestos de interés, pero sí harán crecer los que ya están (como cambiar su diseño o agregar nuevos artículos en las tiendas) o bien adornar el escenario, como ponerle luces cuando sea de noche, un espantapájaros, un guardia, una fuente, carteles, o simplemente digis caminando por ahí como cualquier pueblerino. Esto puede que sume más o menos, pero nunca resta en cuanto evolución se refiere, siempre verás al pueblo crecer de una u otra forma siempre y cuando estés dispuesto a seguir tu objetivo y se ve puede lograr ver la viveza del lugar con su mera presencia.

    Los digis aparecerán en el centro de la ciudad y no siempre serán los mismos, haciéndolo ver más verosímil que estás creando una población activa.

    El segundo cambio que notarás será un mejor acceso o facilidad a casi cualquier cosa. Volviendo al ejemplo del Agumon, con el simple hecho de que ya puedas almacenar tus ítems en un solo punto y que tu mochila recurre a llenarse ya dice mucho. Con tal de reclutar a Coelamon, Palmon y Vegiemon ya no estarás a falta de comida, y no por nada estos digis se reclutan early game. El mismo Coelamon te dará ítems a cambio de dinero, y cuanto más puedas agrandar su tienda más ítems tendrás para comprar, incluso de los más raros. Piximon, Kabuterimon y Kugawamon te ayudarán a conseguir mejores stats cuando entrenes a tu monstruo, y sumando a los vegetales que te proporciona Vegiemon hará que consigas un digimon más fuerte en horas, a comparación de tus primeros días que te demorabas mucho más. Y ni hablemos de las facilidades a la hora de viajar, como las de Birdramon que te llevará a lugares ya visitados o Whamon que te dará un acceso rápido a Factorial Town, que a pata llega a ser muy lejos. Incluso llegas a conseguir un hospital gracias a Centaurumon para que puedas recuperar rápido tus energías y quitarte las heridas y enfermedades.


    A lo que voy con esto, es que si te dedicas a reclutar bichos podrás hacer que todo lo que antes era un “dolor de huevos” sea más pasajero sin dejar de ser exigente. Así mismo, la estructura del juego está pensada en que, si aun no tienes idea de cómo criar a tu Digimon, gran parte de los monstruos que debes reclutar para esa clase de mejoras por lo general no requieren de una batalla directa (o no hay peleas directamente), así que el único impedimento que podrías tener sería el de no investigar como es debido.

    Una última cosa que se podría recalcar es que los personajes que reclutas no se quedan como unos simples npcs que te dicen cosas random. De hecho, me llega a sorprender lo normalizado que está teorizar sobre cómo funciona el juego o lo poco expositivo que es sabiendo que gran parte de estos digis que reclutas te dicen con sumo detalle. Coelamon, Tsunomon, Punimon, Shellmon, Yuramon, Kuwagamon, Palmon, Koromon y prácticamente todos los npcs de la casa de Jijimon te dan información básica de cómo funciona el juego y te dan tips de sobre cómo avanzar en la trama. Estos hacen connotar su personalidad curiosa y su conocimiento de la isla, mientras que otros te darán su sabiduría para que sepas entender cómo avanzar no tanto en el progreso de la historia sino como jugador, mostrando la importancia que da todo el grupo para que la isla florezca y puedas dar lo mejor de vos en cumplir con tu objetivo y buscar la fuente del problema.


    La crianza y la evolución.

    Y ahora, después de tanta palabrería, ya nos podemos enfocar en lo más problemático según muchos. La crianza se basa en tareas típicas que podrías hacer incluso con tu propio perro, los cuales seria felicitarlo, regañarle, mandarlo a dormir, que participe en peleas (bueno esto no tanto), darle de comer, llevarlo al baño, entrenarlo, o simplemente pasear con él.

    Quizás suene sencillo, ya que en un juguete virtual no existía mucho problema, pero recuerden lo que dije cuando quise dar contexto en la creación de la obra: esto es ahora un mundo abierto, y peor aún, en un inicio no tendremos muchos suministros. De hecho, en juegos de crianza como pueden ser Princess Maker y Monster Rancher, ahí no existe un mundo realmente abierto, solo pequeñas secciones de exploración tan limitadas que llegan a ser incluso totalmente omitidas para la experiencia de juego, lo que significa que descubrirlas es una simple opción que el jugador puede tomar, aparte que cosas como las tiendas y casi cualquier punto de interés sigue estando al coste de un par de clics como en Ver. S. De ahí radica parte de la curva de dificultad y abre una capa más de profundidad en el sistema de Digimon World, el cómo te mueves dentro del mundo para poder fortalecer a tu mascota, conozcas nuevos puntos de interés, tiendas o gimnasios para así tenerlos en cuenta y darle atención a tu Digimon cuando la necesite sin usar siempre la ciudad principal como medio administrativo, ya que como se aclaró anteriormente, en tus primeras horas de juego estará en bolas y si no reclutas a nadie seguirá igual.

    Algo que se liga bastante con la crianza es, claramente, la evolución del animal. En base a nuestros tratos podemos llevar a que este se desarrolle, que sea mas grande, y en Digimon World nos muestran las etapas de crecimiento como:

    Baby > In Training > Rookie > Champion > Ultimate.

    Las primeras etapas llegan a durar apenas horas, mientras que las últimas pueden prolongarse a días de desarrollo. Por consiguiente, el esfuerzo se torna mucho más exigente conforme crezca la mascota, ya que necesitará de otro tipo de cuidados. Esto suena un poco inusual para un juego de monstruos de la época porque, para tener un contraste, en Pokémon para evolucionar se usa por lo general la experiencia en el combate y solo tienen una línea evolutiva salvo contadísimas excepciones. En el juego de Bandai se manejan con árboles evolutivos, o sea, un solo bicho puede transformarse en varias cosas, y para saber en qué se va a inclinar su desarrollo se creó algo llamado “puntos de evolución”, lo cual se traduce en cumplir ciertos requisitos durante la crianza del Digimon para que este evolucione. No es necesario que cumplas TODOS, pero sí la mayoría, y al existir monstruos que puedan compartir una misma condición es probable que debas diferenciarla agregando una condición más o priorizando alguna otra. Además, las etapas más tempranas tendrán un solo requisito, y cuanto más vaya creciendo, la cantidad de requisitos irán aumentando.
    La duración de cada etapa de desarrollo llega a ser también un “tiempo limite” para que cumplas con los requisitos, a excepción de la evolución a Ultimate ya que ahí evolucionará cuando ya tengas los requisitos necesarios y la hora del reloj cambie. A continuación se detallarán todas las condiciones posibles, partiendo primero por las que son considerados los “criterios principales”:


    Los parámetros:
    Son los típicos stats de cualquier rpg, siendo HP, MP, ofensiva y defensa los más auto explicativos; la inteligencia hace que el monstruo aprenda nuevos ataques y sepa entender nuevas ordenes (se explicará en la sección de combate a qué se refiere con esto) y la velocidad determina la rapidez con la que realizan dichas ordenes. Si bien todos estos atributos se pueden subir peleando, la ganancia es miserable, y la idea es utilizar los gimnasios, los que tienen distintos entrenamientos y cada uno prioriza el crecimiento de alguno de tus stats.
    En todas las etapas de crecimiento se tiene en cuenta los parámetros, con la única diferencia de que, cuanto mas grande sea el monstruo, mas exigente serán estos requisitos. Por ejemplo, siendo In-training solo te pedirá que priorices tres stats sobre el resto para ser algún Rookie, y en Rookie necesitarás que entre uno o cuatro stats estén por arriba del 100 (o si todos tienes en 100 o alguno que no debas lo esté, marcar una diferencia de 40 puntos para triggerear la preferencia) para ser Champion, y con Champion debes respetar cuatro o todos los parámetros con una cantidad de stats especifica (siempre siendo múltiplos de 100 o de 1000 en el caso del HP y MP) para convertirte finalmente en un Ultimate.

    Los stats que ganamos al vencer al mismísimo jefe final Vs. Los que ganamos durante una hora de entrenamiento.

    Peso:
    Este se explica por sí solo. Virtualmente solo funciona como requisito de evolución, y solo se toma en cuenta cuando quieres evolucionar a un Champion o Ultimate. Hay un margen de error de 10 kilos, o sea que durante sus días de crecimiento debería tener una dieta que se balancee teniendo en cuenta ese dato. Existen distintos tipos de carnes que, además de saciar el hambre (algo de lo que hablaremos más adelante también) sirven para aumentarle de peso, y dependiendo de la carne perderá más o menos. Así mismo, hay verduras y vegetales cuya función es adelgazarlo. Otras formas de perder peso sería dormir, ir al baño o que ande sin energías (que es cuando aparece el icono de hambre en su cabeza) y cada una baja más o menos peso que las otras.

    Errores de crianza:
    Este quizás sea el más ambiguo de todos, más que nada por saber qué cosa toma el juego como un error de crianza, y que entre la comunidad no saben muy bien qué es lo que cuenta como error. Genuinamente, hasta donde se sabe y de lo que pude probar por mi cuenta, lo único que cuenta como error de crianza es que haga sus necesidades fuera del baño, que no lo mandes a dormir y no darle de comer cuando te lo pide. Muchos creen que cansarlo, que se enferme, se hiera o pierda una batalla son también errores, pero no lo son realmente. Supondré que considera errores los que llegan a suceder 100% por voluntad del jugador, ya que justamente el querer ir al baño, el querer dormir y el querer comer son notificaciones que aparecen explícitamente en pantalla, es imposible que no las notes, y el hecho de que quieras obviar las necesidades urgentes del digi para priorizar otras cosas pues llega a tener sentido que estas sean las únicas que se consideren como error de crianza. De todas formas eso no quiere decir que el resto de cosas que se creían que eran errores no influyan en otros aspectos, siguen siendo igual de importantes pero eso se explicará más adelante.
    Los errores de crianza se empiezan a tomar en cuenta desde Rookie, y dependiendo de cuantos cometas tomará parte de una rama u otra de evolución. Lo que quiere decir esto, es que también podrás evolucionar si cometes muchos errores de crianza, pero claro, esto hará que te dé unos digis totalmente distintos a lo usual, por lo que el método de crianza se verá afectado, lo que por lo general hará que sea mas jodido mantenerlo, ya que su evolución representará a un monstruo más descuidado el cual requiere mayor atención.


    Los criterios principales de evolución siempre aparecerán como uno de los requisitos a cumplir para cada Digimon, pero también existe algo llamado “criterio bonus”, que de hecho son requisitos que en su mayoría se descubrieron hace relativamente poco (más de diez años de haber salido el juego). Cada Digimon posee al menos 2 o 3 criterios bonus que, con tal de hacer uno, ya se toma como cumplido y ayudará a priorizar una rama evolutiva por otra. Estos pueden llegar a ser:

    Felicidad y Disciplina:
    Son las dos barras que aparecen en una esquina. Los requisitos bonus te pedirán que cumplas una de las dos. La primera determina la esperanza de vida del monstruo (si está por arriba del 50% tendrá una vida saludable y morirá por vejez, pero si está por debajo es probable que muera más temprano por depresión), mientras que la segunda muestra qué tan frecuentemente te hace caso (ya sea en batalla o dándole ítems) o cuánto retiene las ganas de ir al baño. Hay dos acciones que puede hacer el jugador que involucran directamente a estas dos barras (felicitar y regañar) las cuales utilizas para regular ambas barras, y hasta donde se tiene información si haces alguna de esas acciones en los momentos indicados, como regañarle porque te rechazó un ítem o que se cague en el piso, tendrás un incremento extra de las barras (dichos ejemplos son los únicos comprobados).
    De todas formas, no solo se basa en esas dos acciones para regular la barra, también existen ítems raros que sirven para buffear concretamente una de las barras, y el Digi puede conseguir o perder disciplina o felicidad de forma natural de un millón de maneras. Cosas como caminar en lugares donde a él le gusta o le disgusta, entrenar de forma adecuada o sobre exigirse, huir de batalla o ganarla, son solo algunas cosas que podes hacer para cambiar el animo del bicho y el respeto que te puede tener.

    Cantidad de peleas ganadas:
    Bastante auto explicativo esto. Algunos digis pedirán como requisito bonus el tener cierta cantidad de peleas que deben ser ganadas (aclaro esto porque también es un rumor falso de que solo debes entrar en pelea y ya). Hay que tener cuidado con este requisito porque hay ciertos monstruos que te pedirán que no ganes ninguna pelea, así que ahí torna otro significado la función de huir de ellas. De lo que no estoy seguro, es si cuentan también las batallas de jefe, pero como en early game empiezas con un Agumon o Gabumon y ninguno de estos tiene una evolución que como requisito sea el no ganar peleas, pues no es un problema a la hora de criar en tus primeras horas.

    Cantidad de Técnicas aprendidas:
    Sobre las técnicas hablaremos mas a profundidad en la sección de combate. Pero ahora hablaré de su función en la evolución; básicamente tienes una planilla de técnicas en la que varios digis pedirán una cantidad en especifica. Si buscas guías verás que la cantidad llega a ser algo exagerada (mas de 20 o 30 es lo usual) pero esto ocurre justamente porque es una herramienta que te servirá más en el late game. Coincidentemente, un criterio bonus que piden casi todos los monstruos es la cantidad de técnicas aprendidas, y sabiendo que con cumplir un solo criterio bonus ya tienes el punto de evolución, pues la idea de conseguir más técnicas hace que sea más rápida la crianza, y que el enfoque de priorizar requerimientos esté más inclinado en los principales. Aunque eso sí, no te creas que conseguir las técnicas es sencillo.


    Para cerrar con los criterios, también existe un Punto de evolución que es un requisito específico para que se pueda evolucionar a cierto Digimon en particular, el cual podría ser llenar la barra de Virus para que salga un Sukamon (la cual se llena haciendo las necesidades en el piso), hacer que Metal Greymon pierda una batalla para que evolucione a Skull Greymon (pues este último es el esqueleto del primero), hacer que un Numemon se ponga un disfraz para el evolucionar a un Monzaemon, ser un digimon en especifico para evolucionar naturalmente a otro (ser un Biyomon para que se te facilite la evolución a Birdramon), entre muchas, muchas más.

    El entrenamiento en el gimnasio es un reemplazo a lo que sería la subida de niveles, acá es donde se suben nuestros parámetros como nos guste, y como se ha dicho con anterioridad, esto tendrá efecto en el crecimiento del Digimon. Pero no podemos abusar de este, ya que cada entrenamiento durará siempre una hora, por lo que el digi le llegará en algún momento la hora de comer, ir al baño o dormir, y si no le prestamos atención a eso podemos conseguir un error de crianza. También está el hecho de que existe un medidor de cansancio, al que dependiendo del ejercicio que esté haciendo el Digimon puede subir más o menos rápido (subir inteligencia no requiere el mismo esfuerzo físico que subir ataque o velocidad) y si subes la barra hasta un 80%, el bicho entrará en estado de fatiga, y si lo sigues entrenando no solo bajará drásticamente la felicidad o disciplina sino que además apenas subirá los stats y terminará siendo un trabajo en vano. Esta barra en sí está oculta, así que debes saber cuándo tu digimon se va a cansar, y eso te enteras al ver si su barra de felicidad está bajando durante el entrenamiento, ahí ya te estás enterando de que se está cansando. Es necesario evitar el estado de fatiga porque es posible que el digi pierda mucha felicidad, y al tener la felicidad muy baja hará que empiece a bajar tus stats lentamente (mostrando una mariposa alrededor del monstruo). Técnicamente, esto ocurre si tienes la felicidad por debajo del 40% sea la razón que sea, pero como el cansancio es el estado que más hace bajar dicha barra, es normal que te cause esa bajada de stats al sobreexigirse.

    Algo que se puede sacar mucho provecho es el nivel de Tamer, el que hablamos justamente cuando detallamos el carácter del protagonista en el inicio del juego. Es prácticamente imposible no terminar el juego con al menos haber subido una vez el nivel, ya que para subirlo requiere haber entendido lo básico de la crianza en el juego. Hay muchísimas formas de subir el nivel de Tamer, pero el más normal es evolucionar a tu mascota a Ultimate (aunque muy rara vez consigue un nivel extra evolucionando a Champion), que esté 100% feliz al final del año, o que gane torneos de alto rango. Estas recompensas evidencian qué tan bien estás entendiendo el sistema, ya que requieren horas de esfuerzo para que se pueda concretar la última rama de la evolución o entrenarlo lo suficientemente bien para que pueda ganar en los combates más difíciles del coliseo. Asimismo, el nivel de Tamer podría bajar si te descuidas mucho, haciendo que tu Digimon entre a torneos de muy bajo rango, dándole ítems pirata que podrían perjudicar su esperanza de vida o que muera en combate, todos estos requisitos son cosas que solo podrás hacer 100% por tu cuenta y serás castigado por ello. La idea de subir tu nivel de Tamer y procurar que no baje se debe a algo que te llega a mencionar Tokomon (volviendo al tema de que nadie te explica nada…) quien te explica que, cuando tu Digimon renazca, este tendrá estadísticas base mucho mas altas, llegando incluso a tener una base de 90 o incluso 100 en varios parámetros al nacer, facilitando demasiado la tarea de volver a criarlo que seria igual de complicado si no fuera por tus ganas de aprender y mejorar.

    A pesar de todas las virtudes que dije, y lo cuidadoso que es el sistema para mantenernos alerta de nuestra mascota y así darle una atención similar a la que le daríamos a una de la vida real, la crianza es considerada “críptica” por la comunidad debido a que no se puede saber qué Digimon estás por sacar sin el uso de guías. Si leyeron con detenimiento sabrán que en la sección de “prosperidad y cambios” hable de varios NPCs que LITERALMENTE funcionan como un tutorial de cómo sobrevivir en tus primeras horas, así que desde el vamos hay que estar poco lúcido o interesado en el juego como para no saber cómo se evoluciona o qué cosas debes tomar en cuenta. Claro, el juego nunca te dirá exactamente qué peso necesitas o cuáles son los stats para los monstruos, pero esto para nada es un punto en contra ni se puede considerar críptico ya que la gente malinterpreta el objetivo del juego.

    Nuestra misión principal es restaurar la ciudad y descubrir los misterios de la isla. No estamos jugando Pokémon, en el que la idea es completar una Pokédex y ser el líder el gimnasio. El Digimon que nos acompañará la aventura es más que nada un reflejo de la forma en cómo jugamos al juego. No existe una evolución “errónea”, el juego no castiga de una forma engorrosa si te escoges un Numemon o Sukamon como mucha gente te lo suele pintar. Todos los Digimones llegan a ser competentes de alguna manera, y si no los aceptas, técnicamente estas negando la forma en cómo juegas. Obvio, si llegas a tener a uno de los dos que dije quiere decir que estás bien manco, pero no debes rechazar tu manqueza: aceptala, vive con ella y verás que de una u otra forma habrás progresado con tu travesía e incluso habrás aprendido algo de ella. Además, no es necesario luchar contra gran parte de los Digimones a reclutar, por lo que no te debe de preocupar tanto si el digi no tiene los stats muy altos; aún lo puedes usar para explorar. Enfócate en tu aventura y progresa en ella, no en si te va a salir el digimon que te gusta. Arruinas uno de los mayores elementos jugabilísticos de Digimon World, el cual lo vuelve más singular, todo por el simple capricho de tener a tus bichos favoritos del animé. Es más que evidente que esto está hecho para que tengas un acercamiento más sentimental hacia tu mascota, y a la larga si abusas de las guías te terminarás aburriendo y perderás parte del factor sorpresa.


    Por último, una de las críticas mal sonadas es el hecho de que tu Digimon puede morir. porque sí, este bicho la puede palmar. La justificación para tomar este punto como uno negativo es que, al morir, tu digi renace, por lo que involucra criarlo todo desde cero, haciendo que el entrenamiento sea más tiempo muerto que una experiencia agradable. Esto ya sé explicó con anterioridad, en más de una vez: HAZ CRECER LA MALDITA CIUDAD Y ASÍ DEJAS DE QUEJARTE. Si realmente hiciste un progreso en tu aventura, tendrás ciertas mejoras ya sea en tu gimnasio o en tus recursos que harán el entrenamiento muchísimo más ligero y rápido. Además, es imposible pasarse el juego al 100% con una única cría porque hay varios eventos en la historia que te piden tener algún elemento en tu Digimon en específico (ser de algún atributo, de cierto nivel evolutivo, ser de cierta especie, etc.) por lo que esto te incita a tener varios bichos a criar, no solo para explorar todo el mundo, sino que también para que te familiarices con todos los monstruos que te puede ofrecer el juego.

    Quizás esta sea la critica más pendeja, al menos hoy en día, porque el día en que salió el juego sí se podría decir que el público andaba muy inquieto con la idea de que fallezca tu mascota virtual. Puede que a estas alturas de la vida nos suene normal el concepto de muerte en esta clase de juegos, pero cuando estaban en auge solo los tamagotchi y los v-pets hacían eso.
    No sé si lo sepan, pero hubo bastante controversia y debate sobre este tópico, si hacer lo mismo que los productos de Bandai, porque hay que recordar que estos videojuegos se crearon con el fin de maravillar a los niños que no podían tener una mascota de verdad en su casa. En juegos como Fin Fin on Teo the Magic Planet lo máximo que podría suceder es que la mascota huya y el clásico Petz tuvo varias entregas en las que la mascota vivía para siempre, no fue sino hasta que un día añadieron una encuesta en su página preguntando a su público si deberían meter una mecánica de muerte en sus juegos, y al menos para mí, que viví una época en la que está normalizada esa opción, me sorprendí al ver que solo tuviese un 10% al SÍ, en una votación de mas de tres mil personas (que en 1997, créeme que eran demasiadas).
    Comentarios en el que hablan de los traumas que podrían dejar a los jóvenes son el pan de cada día de ese hilo, y en retrospectiva, es increíble ver cómo los juegos japoneses influyeron demasiado en ese aspecto. Otro de los comentarios es que, de tener que morir, mejor intentar que estos vivan felices mientras puedan, que estén bien alimentados y ejercitados. Esto ya lleva a otra capa de moralidad que es la de hacerse responsable del fallecimiento de tu mascota: si la causa de su muerte fue una enfermedad, que nunca lo alimentaste bien, nunca le brindaste felicidad a su vida o le hiciste consumir ítems que le perjudican a su salud, hace que toda la culpa de su fallecimiento recaiga en ti.

    Puedes buscar demás respuestas acá: https://web.archive.org/web/19970606040702/http://www.dogz.com/respond.htm

    Y quizás Digimon no sea el primero en aplicarlo en una consola de videojuegos (ya estaba Princess Maker Monster Rancher antes) pero sí puedo decir que lo logra de una forma deslumbrante el cómo se siente vivo la mascota, TODOS los digimons tienen animaciones y sonidos de cuando están felices, de cuando están enojados, de cuando quieren ir al baño, cuando tienen hambre, cuando están cansados, y todas son únicas. Incluso tienen animación de cuando comen, van a cagar y se acuestan a dormir, Dios mío. Se siente tan bonito ver cómo un Agumon ruge o hace un berrinche, como un Metal Greymon intenta jugar con tu cabeza, cómo un Giromon se tambalea como un péndulo porque anda aburrido, cómo un Skullgreymon se suena el cuello, cómo un Andromon baila, sabes que están ahí acompañándote; y cuando llega el momento, ves esa animación lentísima en la que se oscurece toda la pantalla, lo enfocan, ves como estos gritan o sollozan mientras pierden sus texturas y se caen sus polígonos, LO SIENTES DE VERDAD. Claro, te tendrán que dar otro para seguir con tu aventura, pero llega a ser bastante comprensible el por qué el público rechazó el juego bajo este criterio, y más aún por la forma en cómo lo aplica Digimon. Es un juego que se nota que quería apelar mucho al compañerismo entre el humano y su dueño, y con la enorme cantidad de cuidados que tienes para darle, la cantidad de personalidades que pueden tener, todas sus preferencias, que siempre los verás crecer y los acompañas hasta la muerte, termina siendo una aventura bastante melancólica

    Así de gráfico puede llegar a ser.

    El combate

    Volviendo a remarcar lo diferente que es el supuesto plagio, el combate también es muy distinto al de Pokémon. En primer lugar, no es un combate por turnos, es uno en tiempo real. Segundo, al igual que en Pokémon, tú le das órdenes al bicho, pero en lugar de limitarse a solo acciones de pantalla típicas de un RPG ala Dragon Quest Final Fantasy, en Digimon World en un principio solo podrás decirle que haga lo que quiera, ya que es un personaje bobo que no te podrá comprender a menos que le enseñes subiéndole la inteligencia, que cada 100 puntos podrá entender órdenes como atacar y que skills usar, alejarse, bloquear o cambiar de objetivo ya que existirá la posibilidad en la que te tengas que enfrentar con hasta cinco monstruos a la vez. La rapidez que tenga con estas acciones dependerá de su stat de velocidad, pudiendo incluso cancelar acciones si la tienes moderadamente alta. No habrá ningún problema con subir el stat de inteligencia ya que, como se ha dicho antes, consume muy poco cansancio, y es posible estar un día entero subiendo este parámetro haciendo solo paros para comer, ir al baño y acabar el día apenas rozando el 80% de estrés aceptado.

    Así como hay ítems para ayudarlo a crecer, también hay para el combate. Se destacan los disquetes de HP y MP, que son básicamente los pociones y éters del mundo, y puedes encontrar variaciones de estos como uno que recupera el triple de lo normal o uno que te recupera tanto HP como MP. También hay discos duros que están para buffear al bicho con cierto stat en especifico hasta que acabe la pelea, siendo los más raros los que te buffean todos los stats de una. Existe también un ítem que es un “parche” que “repara glitches y errores del sistema”, que eso sería la equivalencia de los estados en combate, o sea el envenenamiento, stunt, etc.


    La forma en como se implementan estos estados en Digimon World llega a ser curioso en ciertos casos. Hablando del envenenamiento, este siempre se irá cuando acabe el combate, pero mientras esté activo su daño empezará a aumentar, llegando a veces hasta 300 de daño, y el aumento será más rápido o lento dependiendo de las debilidades del digimon y el ataque con el que se usó para envenenarlo (ya que hay skills con venenos más potentes que otros). Para colmo, mientras estés envenenado irás mucho más lento de lo normal, así que si no tienes un ítem para solucionar este estado, es mejor acabar rápido con la pelea.
    La maldición también existe en Digimon World, que por lo usual este estado es para bajar considerablemente tu defensa y ofensiva por un rato. Lo que suelen hacer algunos juegos es que cambian la forma del personaje para que este se muestre más indefenso, como por ejemplo en Final Fantasy Adventure que te conviertes en un Moguri o en el FFVII que te conviertes en sapo. El caso es que, la mejor versión de “maldición” en un videojuego a mi parecer es justamente la de Digimon, ya que cuando te maldicen te conviertes en… un sprite 2D de las mascotas virtuales. Y eso, eso es GENIAL. Literalmente te pegan un Downgrade como si un producto de Ubisoft fuese, y te mueves igualito a los bichitos de los llaveros, para colmo no es ningún sprite genérico, porque todos los Digis tienen su propio sprite representativo, y recordemos que aún te estás moviendo en un escenario tridimensional, volviéndolo así en uno de los mejores estados visualmente hablando. Un dato extra es que, tanto como cuando se convierte en pixel así como cuando vuelve a la normalidad, ambas animaciones te dan frames de invulnerabilidad algo largos, así que es posible usarlo en contra del enemigo cuando quiera hacer un ataque mortífero.
    La parálisis y la confusión serían los menos atractivos, ya que simplemente son lo mismo que en cualquier otro juego. La única diferencia sería que la parálisis siempre durará 10 segundos, y a menos que utilices un ítem solo tendrás que esperar ese lapso de tiempo para que se te vaya el efecto, y rogar que no te violen en el acto.


    Pero claro, esos estados no se consiguen con otros ítems, sino obviamente con ataques que acá también tenemos una amplia variedad. Si tomamos nuevamente de ejemplo a Pokémon, ahí la forma más usual de conseguir habilidades es subiéndole el nivel hasta que aprenda una nueva habilidad, con la posibilidad de tener solo 4 ataques en tu plantilla, y en el caso de que quiera aprender otro más deberá reemplazarlo, eliminando el que quiso cambiar. En Digimon solo puedes tener 3 ataques en tu repertorio, pero las que no uses nunca se van a olvidar, incluso puedes cambiarlas fuera de combate cuantas veces quieras. Y llegará a ser necesario, ya que no solo es que cada una cause un efecto secundario distinto, sino que también tienen rangos diferentes y su preparación puede variar bastante. También se tiene en cuenta el Digimon que lo esté usando, ya que si usamos, por ejemplo, un Mamemon, con lo pequeño que es posiblemente no tengamos mucha oportunidad con ataques cuerpo a cuerpo por la poca distancia que recorre su brazo, en cambio uno mas grande como Metal Greymon el mismo ataque podría surtir mejor efecto por el tamaño de su modelo, que equivale a una hitbox mayor.
    El tema acá, es que en Digimon no hay sistema de niveles, por lo que las habilidades se consiguen de otra forma. Si bien es posible conseguirlas subiéndole brutalmente la inteligencia o hablando con algunos NPCs del juego, lo más natural es llevarlo a pelear. Acá hay que tener en cuenta varias cosas que son esenciales en la búsqueda de tus técnicas, que son la especialidad y el Digimon con el que combatirás. Un Digimon puede tener hasta 3 especialidades, las cuales representan la clase de habilidad que pueden aprender (si son ataques de agua, de fuego, de metal, de lucha, etc) y en base a ello combatir contra bichos que puedan tener las mismas especialidades (que usualmente pueden identificarse por su diseño y zona en la que habitan). Lo interesante está acá: el orden en que están puestas las especialidades importa. Así como ocurre en Pokémon, un monstruo puede ser tipo Fuego-Normal y otro Normal-Fuego y no necesariamente deban ser lo mismo. Acá se manejan por probabilidades, la especialidad que aparezca primero de izquierda a derecha es la que tiene más probabilidad de ser aprendida, mientras que la segunda y tercera tienen menos probabilidades. Me gusta mucho esta idea porque hace sentir que la mascota intenta aprender habilidades en base a la observación de su oponente, y cuántas más veces la vea más tendrá chances de saber cómo funciona, aparte que es la opción más efectiva para conseguir movimientos. Además, si no tenes chance de conseguir la habilidad, no todo es tiempo perdido, ya que es posible que el enemigo dropee un ítem que valga la pena o necesites conseguir victorias para aprobar un Punto de evolución. Cabe aclarar que el orden de las especialidades también equivale a la resistencia que tiene el digimon sobre estas, así que si, por ejemplo, su especialidad prioriza Fuego es bastante evidente qué tipo de ataques le harán menos daño.



    Además de las especialidades, también se tiene en cuenta los atributos. En la franquicia, por lo usual se utilizan virus, datos y vacuna, y existe como una especie de “triángulo de armas” entre estos (o sea que uno es débil a otro pero resistente al tercero y así con todos). En Digimon World y sus secuelas directas, como las especialidades ya cumplen parte del labor de las debilidades y fortalezas, acá los atributos se limitan a poder acceder a ciertas áreas o, en el caso que nos compete ahora mismo, es posible que te facilite o se te dificulte una pelea en base a la cantidad. Para entender el contexto, los encuentros no son aleatorios como es común en los RPGs, es más como un Earthbound que te los encontrarás en pantalla y deberás chocar contra ellos para iniciar la pelea. En base a la cantidad de enemigos que hayan en pantalla al chocarte con uno, serán con los que tendrás que pelear, por eso existen dos estrategias: la de llevar a un enemigo a un lugar donde la cámara solo lo muestre a él y no al resto o la de los atributos, que en el caso de que tengas un Digimon que comparta un atributo con estos, los digis que estarán dentro del campo de visión preferirán huir del combate. No existe un método de saber qué atributo es cada Digi enemigo más allá de la intuición y la experiencia, pero a la larga termina siendo bastante grato este conocimiento ya que te ahorrará bastante tiempo en combate.


    Existe una habilidad que es única para todos los Digimons, que es el finisher. Para tener acceso a esta hay que esperar a que se llene una barra (representada en caracteres de la palabra “Finish!!”) la cual tiene un montón de formas de ser llenada, pero para no marearnos simplemente hay que conectar golpes y defenderse de los ataques enemigos. Cuando esta se llene, deberemos pulsar un botón dedicado y empezar a llenar la barra con los dos gatillos del mando para aumentar el poder del finisher. La gran mayoría de estos son simple espectáculo visual ya que es 100% asegurado de que golpeará al enemigo, y lo único que tendrías que tener en cuenta es que por lo general es una habilidad que corresponde a la especialidad principal del monstruo, y enfocarte en intentar llenar al máximo la barra de finisher. Existen excepciones como el finisher de Giromon que es una bomba que tira para donde se le de la gana y rebotará por algunos segundos, y la idea es que el enemigo la pise para que explote, o el finisher de Digitamamon que tiene una probabilidad de que se golpee a si mismo. Aunque ojo, que esto no es una habilidad exclusiva del jugador, ya que los jefes también pueden aprovechar de esta. Cuando un digi está cargando el finisher, todo se congela y la única forma de evadir los finishers sería la de golpearlo antes de que empiece a cargar, es un poco “triquiñuela” pero si tienes un ataque de tipo proyectil o uno en donde te dé una animación larga de preparación es posible que lo golpees cuando empiece a cargar. Esta habilidad de cancelar el Finisher hace que también pienses cuándo activarlo, porque bueno, la IA sigue siendo IA, y es muy posible que calcule tus movimientos y te tire un ataque cuando menos te lo esperes, así que ahí es cuando cobra sentido los status de parálisis o los ataques de carga, para que puedas calcular mejor tus próximos movimientos sin que estos se interpongan de una habilidad que congele el combate.


    Las peleas pueden llegar a ser muy rápidas así como muy lentas, pero siempre existirá el éxtasis al pelear una, ya que al ser todo en tiempo real debes administrarle los ítems de soporte de la misma manera, haciendo que estés en constante movimiento cuando tú bicho no es lo mejor que hay y le estén rompiendo el culo o si le falta maná para hacer sus ataques, e ir suministrándole lo que necesita para que sobreviva. Y dejando de lado eso, existe la satisfacción de terminar pronto una pelea debido a que tu Digimon se volvió muy poderoso gracias a tu entrenamiento, haciendo que valga la pena los minutos dedicados al gimnasio.

    Perder un combate en Digimon World hace que te regrese a la casa de Jijimon. Es muy natural que en los RPGs, si no existe pantalla de Game Over, te regresen a la última posada en donde descansaste o al primer sitio de donde empiezas el juego. El tema acá es que, debido al sistema general del juego, no basta solamente con que vuelvas a la ciudad y ya. Tu Digimon no solo le bajará un montón la felicidad y la disciplina, sino que además perderá uno de tres corazones, los cuales no se pueden regenerar y cuando pierdas todos tu monstruo morirá asesinado. Para colmo, si tienes varios items en tu inventario es posible que el enemigo que te abatió te los robe, y este los llevará al mercado negro, que encima solo aparece en días muy puntuales. Y claro, deberás pagar por ellos. Esto hace que la importancia de la derrota se vuelva muy significativa, en la que llegas a arriesgar mucho si tienes un Digimon sin entrenar, lo cual deberás tomar en serio cada pelea y utilizar con moderación la acción de huir, ya que a pesar de que te baje la felicidad y disciplina también es mejor eso a todo lo que comenté anteriormente.

    Uno de los argumentos que tienen en contra del combate es que es muy al azar debido a que no manejas con total libertad al bicho sino que le das órdenes de lo que tiene que hacer, esperando a que la IA haga lo que tú digas. Primero que nada, esto está muy ligado a como tú lo entrenas y no puedes echarle mierda a algo que tú ejercitaste mal, porque en otros términos, criar a un Digimon es como entrenar a una mascota, debes adiestrarla de tal forma que sea competente en la lucha. Y además, las órdenes que das llegan a ser inmediatas si tienes bien los stats, que tampoco te piden un número tan alto. Para el caso, tampoco es que no sepas que tan bien o mal andas: siempre verás los parámetros y habilidades con tal solo presionar triangulo. Encima, a diferencia de Pokémon, acá no existe “hierba alta” o combates aleatorios, siempre verás a los digimones enemigos en pantalla, y sumado a todo lo mencionado respecto a esto siempre habrá una forma de evitar el combate o de intentar pelear con la mínima cantidad de luchadores posible. Lo poco reprochable que se puede comentar del combate es que si tienes un Digimon enorme es posible que se quede dando vueltas si se encuentra en un lugar estrecho, pero eventualmente hará el ataque y no hay muchos escenarios así.

    En conclusión, el combate es básicamente una pelea de gallinas súper glorificado y profundo, en el que se tiene mucho en cuenta la cantidad de monstruos en pantalla, la clase de ataques que usas, el Digimon que mandas a pelear ya sea por sus atributos, por sus especialidades o por el mismo tamaño de su modelo para determinar su hitbox, y hasta el tipo de ítems que tienes que suministrarle durante la lucha. Posiblemente en late game te parezca todo muy sencillo, pero el aprendizaje llega a ser súper satisfactorio.

    Post-game y otras actividades.

    Ahora que quedó evidenciado lo profundo que es el sistema, que el juego sí te explica absolutamente todo lo que necesitas saber para poder caminar en la aventura, y que en lo general sea un que evoca una relación muy personal gracias al desarrollo del aspecto de la crianza y exploración… ¿qué hay mas allá de la trama principal?

    Técnicamente, puedes ver el final del juego luego de llegar al 50% de prosperidad, en la que te desbloqueará el monte infinito, en donde se aguarda el último jefe. Obviamente te faltará encontrar la mitad de los digis, así que cuando intentas cargar partida te pondrán una excusa en la que deberás volver al mundo digital. El tema acá, es que al volver, serás recompensado con una medalla de que te pasaste el juego, te fijas en tu perfil y definitivamente, te enteras que el juego no hizo más que empezar.

    La pestaña de medallas se pueden tomar como los típicos logros que abundan hoy en día en la industria. Si bien hay relativamente pocas (unas quince) eso no quiere decir que se puedan conseguir fácilmente. De hecho, cada uno de los logros te exigen conocer por completo el juego, como puede ser el de tener registro de todos los digimons y sus ramas evolutivas, tener todas las técnicas o conseguir el 100% de prosperidad, algo que como mencioné antes no se resume en peleas y deberás hacer otra clase de actividades.


    Uno de los logros es de pescar cien peces, de lo cual apenas se habló en el análisis, más que nada porque su importancia se reduce a un par de reclutamientos y estos son totalmente optativos, pero la recompensa es muy grande si lo logras dominar. La pesca se basa en simplemente tirar una de tus comidas como anzuelo a un sitio en donde se pueda pescar y esperar a que alguien lo pesque, con la probabilidad de que el pez que consigas sea de una mejor calidad que la propia comida que compraste o que este tenga un item raro. Toma elementos muy básicos de la supervivencia en la pesca como el tipo de anzuelo que debes usar para capturar, el tamaño de los peces y su resistencia, la fuerza de la caña y lo más importante: paciencia, ya que habrán sesiones de diez minutos completos en los que deberás esperar a una carnada e intentar agarrarla, y eso sumado a que debes esperar a que el pez esté cansado para así tener una oportunidad de recoger el señuelo sin mucho esfuerzo. Claro, esto no es SEGA Bass Fishing, así que no existe mucha profundidad más allá de esa, es muy directo y simple pero a la vez cumple con lo necesario para representar bien la idea de la pesca, y no como OTROS juegos modernos que lo hacen ver como si fuera un Osu.


    Otro que sale a relucir no solo una, sino varias veces son las medallas del coliseo. Este no está disponible hasta que consigas 15% de prosperidad y reclutes a Greymon, que es el quien abrirá el coliseo. Su relevancia justamente radica en el post-game, ya que es muy jodido intentar ganar varias competiciones si no tienes muy buenos digis ya que no podrás usar ítems, así que es un requerimiento altísimo tener entendido las bases del entrenamiento en el gimnasio y que este ya disponga de las mejoras necesarias, así como un nivel moderadamente alto de tamer.
    Si jugaste Monster Rancher, es probable que te dé ciertas vibras ya que en este también debes respetar las fechas de los torneos, andar preparando a tu mascota para que esté preparada para luchar, las condiciones de victoria (drenarle toda la vida o ganar por porcentaje de HP), entre otras cosas. Aunque claro, prepararse en Digimon World no es para nada lo mismo que en Monster Rancher, ya que este ultimo aún tiene directrices de una mascota virtual convencional y tienes todas tus necesidades a un par de segundos, y ya me harté de explicar que Digimon World no es para nada así, y eso también involucra en estar puntual en los torneos ya que nuevamente debes ir a pata tanto para registrarte como para entrar.
    Las recompensas en estos torneos son dadas tanto para el ganador como para el segundo puesto. El segundo puesto suele tener disquetes súper raros que llegan a ser muy caros en las tiendas, mientras que el primer puesto consigue un ítem de evolución. Bajo lo que nos da a entender el juego, estos ítems llegan a ser reliquias muy preciadas que la única tienda que los vende no usa el dinero global sino unos “puntos de mérito” (abarcaremos eso más adelante) y Whamon tiene uno resguardado en su guarida. Lo que hacen es evolucionar directamente al digimon que nos dice en su descripción, y hay prácticamente un item de evolución para cada digimon Champion y Ultimate. Se puede decir que esto rompe con el principio principal de crear tu propio digimon en base a tu forma de jugar, pero hay muchos factores a tener en cuenta, como el hecho de que esto es una evolución ARTIFICIAL, o sea, tú digimon seguirá teniendo los mismos parámetros, la misma felicidad y disciplina, no te subirá el nivel de tamer e incluso tu esperanza de vida seguirá siendo la misma (ya que una de las ventajas de una evolución natural es que el monstruo vivirá un par de años más), así que sigue siendo prioritario saber entrenarlo, criarlo y cuidarlo.
    ¿Para qué me sirve los ítems de evolución, entonces? Pues, una de sus mayores fortalezas son el poder utilizar otro tipo de habilidades, ya que no todos los digimones pueden utilizar las técnicas que desean ya que son únicas de su tipo y especialidad. Otro sería poder entrar a otras categorías en los torneos, ya que estas se pueden dividir en su especialidad, en algo relacionado a su lore (si viene de una descendencia prehistórica, si son humanoides, entre otras cosas) o en su mascota virtual de origen, ya que todos los digis que podemos conseguir provienen de una versión de la primera generación de productos de Digimon, siendo la versión 0 los que debutaron en el mismo videojuego o si vienen de la segunda generación de productos, los pendulum. También sirven para poder completar el bestiario y así conseguir la medalla de tener todos los Digimon, que tampoco llega a ser malo hacer esta estrategia debido a que conseguir estos mismos requiere muchísima experiencia previa, y aparte conseguir estos items de esta forma llega a ser mucho más disfrutable que andar leyendo una puta guía.


    Otro logro que podemos notar es uno de conseguir todas las cartas. Si somos muy despistados y nunca vimos la maquina expendedora de tarjetas en la tienda, o nunca nos encontramos con el mercado negro que nos regalan una al hablar con uno de los mercantes, o bueno varios digis que al hablarles te preguntan si estás para canjear una carta suya con la tuya, al volver cargar la partida nos enteramos que conseguimos una carta del jefe final, enterándonos de que esto existía desde siempre si vemos el perfil de jugador. La única función de estas es tranquilamente tener el logro y ya, aparte de ver las ilustraciones bonitas que tienen. Pero tienen un segundo uso, que es utilizar a Shogun Gekomon. Este digimon si bien no lo podemos reclutar, nos puede ayudar si le intercambiamos las cartas que tenemos por puntos de mérito (lo que les comenté antes), y estos puntos los podemos canjear por ítems raros que él tiene, como puede ser una caña más resistente, chips para aumentar tus stats o items de evolución. Cada carta tiene su nivel de rareza, que se representa perfectamente en la probabilidad de conseguir estas con la maquina expendedora. Y en serio, lo representa *muy bien*. Este personaje nos será de mucha ayuda pero mas que nada con los chips, ya que si bien podemos gastar en un ítem de evolución, estos son MUY caros y los puntos de mérito que te da no llegan a ser gran cosa si la carta es común, y ahorrar puntos llega a ser un martirio y súper tedioso, así que es mejor organizar tus compras.


    La actividad post-game resulta ser en demasía muy superior al juego principal en cuanto duración, siendo este simplemente reclutas digis que la mitad podría durar a lo mucho veinte horas de juego, mientras que hacer todos los torneos, conseguir todos los digis, pescar al menos cien veces, tener puntaje perfecto en curling, tener todas las cartas, entre otras cosas te puede llevar fácil más de cien horas de juego, siendo claro está los torneos lo que más tiempo te va a llevar y por buena consecuencia es lo más entretenido de hacer, ya que se aprovecha al máximo el combate y te hace pensar más que nunca tus estrategias debido a la ausencia de ítems, y llega a ser muy grato que disponga de un efecto cámara que puedes moverla como quieras, y cada ataque hará un enfoque especial para hacerlo más cinematográfico e impactante.

    ¿El juego es perfecto?

    Así como mi idea de todo este escrito fue para combatir con la desinformación y dar a conocer varios elementos que nunca se habían explicado a detalle debido al poco interés del nuevo publico, también es mi deber de hablar de lo que el juego hace realmente mal.

    La respuesta es obvia, no es perfecto, es prácticamente imposible llegar a eso. Uno de los principales problemas que tiene el juego sería el framerate, ya que está lockeado a una frecuencia menor a treinta, y ni hablemos de las versiones europeas que por sus televisores debían correr todo a diez hercios menos. Imaginaré que es debido al poco presupuesto que no tenían para contratar a mejores personas para optimizar el juego en Playstation, porque incluso se puede ver en ciertos escenarios que utilizan modelos de digimons prerenderizados en medio de otros 100% poligonales para que el juego siga corriendo estable, y bueno cabe destacar que todo el tiempo estamos moviéndonos en escenarios de plastico que es algo natural de ver en los juegos de la 32bits de sony. Si a eso le sumamos los tiempos de carga constantes, la experiencia de jugar Digimon World no llega a ser gratificante si no tememos mucha paciencia, aunque por suerte existen emuladores como los que proporciona Retroarch para mejorar el framerate, tiempos de carga y renderizado para que esta clase de juegos sean mucho más disfrutables hoy en día.

    También está el tema de que hay mucho looping de la música, aunque es un detalle menor ya que bastante del soundrack se compone de música ambiental y cuando entramos en pelea no existe looping como tal, pero cuando estamos en un dungeon o lugares como Gear Savanna o Geko Swamp en donge sí tienen un tema destacable llega a molesar cuando cargas otro escenario y se vuelve a loopear, haciendo que no se pueda apreciar muy bien.

    Luego están los bugs críticos que lastimosamente existen en las versiones no-japonesas. Cosas como que cuando termines una pelea con un jefe y no salga la pantalla de resultados obligándote a resetear, o que se te crashee el juego al intentar escuchar el jukebox de Giromon en la versión americana, o que sea imposible de avanzar la aventura gracias al famoso Agumon de la versión europea (que para remarcar, esto solo existe en esa versión y en ninguna más). Por suerte, el que se cuelgue durante una pelea llega a pasar muy poco. Al escribir este análisis me completé el juego 6 veces y los únicos casos en donde me sucedió fue en la segunda pelea con Devimon en el monte infinito, en la pelea de Garurumon y en la pelea con Meteormon, todos estos casos sucedieron una sola vez en alguna de las seis dichosas partidas.

    Y hablando de cagadas debido a localización, CUALQUIER traducción oficial del juego llega a ser penosa. Por suerte, lo que es esencial se entiende perfectamente, pero es imposible notar que el protagonista llega a sonar mucho menos sarcástico que en la edición del sol naciente, que hayan digimons con los nombres mal puestos (y no me refiero a adaptación, sino que literal CONFUNDEN UN DIGIMON CON OTRO), que el “secreto de evolucionar e ir a comprar en la tienda” de Tsunomon no se entienda por que lo tradujeron del orto y quizás se quede así hasta que alguien traduzca el juego del japonés a un ingles mucho más fiable, o que en la explicación de los iconos de las técnicas hayan copiado y pegado una misma descripción, haciendo que se entienda menos la diferencia entre estos.


    Y bueno, después tenemos el Bonus Try, que es una opción manual del entrenamiento, que ningún humano usaría porque es muy poco exacto, la ruleta de lotería va muy rápido y ese chiste de que a menos que manipules las variables como todo buen speedrunner siempre te equivocarás en tus primeros intentos por pura naturaleza de código, llega a ser una broma de mal gusto, más sabiendo que las consecuencias de fallar son graves (ganas poquisimos stats bajo el mismo coste que entrenar normalmente, volviéndolo una perdida de tiempo). Posteriores entregas utilizaron minijuegos más acordes a lo que entrenas, juegos en donde tienes un control total de tus acciones y si llegas a fallar es por obra tuya que por un código maliciosamente programado.


    Coleccionar cartas es una basura total, las cosas como son. Si bien hay digis que te intercambian ciertas cartas raras por otras comunes, lo usual será utilizar la maquina expendedora para obtener todas, y ya les digo que se podrían quedar HORAS gastando y gastando para que salga una sola carta super rara, incluso teniendo el máximo dinero posible, y que aún así no salga. Imagínense, que el máximo de cartas que podes tener de cada digi es 9, y que para un puto Phoenixmon o Megadramon haya estado literal DOS HORAS para SOLO esos y que me den solo dos cartas de cada uno. En lo personal, veo muchas maneras de arreglar esto, ya sea poniendo más digimones que te pidan canjear, o que algunas se puedan conseguir en alguna parte del mapa, o que algunos digis como recompensa de reclutarlo sea que te den una carta suya, o bueno, AUMENTARLE UN POQUITITO LA PROBABILIDAD DE LAS RARAS QUE ME LA JUEGO QUE LA DE MEGRADRAMON TENIA 0.0000000001%.

    Ahí vemos a Leomon queriéndose ir del juego poco a poco.

    Conclusiones.

    Luego de haber escrito tanto, sinceramente ya ni sé cómo acabar con esto. Digimon World fue un juego que conocí en mi infancia pero estaba interesado en otras cosas como para darle un interés genuino, luego volví a jugarlo el año pasado gracias un video que, cada que lo recuerdo, más odio le tengo por lo desinformativo, intelectualmente deshonesto, hipócrita y favoritista que puede llegar a ser. Al volver a jugarlo, con todo el conocimiento videojugabilistico que anduve engendrando desde mucho tiempo, me llevo la sorpresa de que es uno de los mejores juegos que he tocado en mi vida, y me llega a sorprender un montón como este juego con tal profundidad en su sistema de combate, el nivel de cariño que se tiene en lo visual, en el poder de darle personalidad a cada uno de sus personajes con solo sus animaciones, y lo verosímil que puede llegar el sentimiento de criar a una mascota, haya sido tan mal recibido en su día y que actualmente aún se siga viendo con malos ojos. Y con la salida de Next Order, que es una casualización por completo del sistema del primer World, aún tuvo una mala aceptación por el público más casual por lo complicado que puede llegar a ser, no me dan esperanzas de que otras desarrolladoras lo tomen de base para crear nuevas propuestas, y posiblemente se quede como un título fuera de tiempo que siempre disfrutarán los más nichosos. Esta mezcla alienígena que creó Digimon no se verá mucho en otros lados, volviendo uno de los títulos más singulares que podes encontrar en Playstation. Si buscas alternativas de rpg o de crianza, te gusta ser fan de lo nichoso o adoras los desafíos, vas a adorar este juego. Espero de corazón que te haya servido este análisis, ya sea para querer darle una segunda oportunidad a un juego que seguramente habrá sido parte de tu infancia, o por si ya jugabas al juego y querías ver una introspección de un pibe cualquiera, o que simplemente querías ver a alguien tan loco como para dedicarle todo un testamento a un videojuego que nadie le da bola.

    Agradezco a Alpha_Bit, SacredHX, Zapallo y Ghost por revisar el escrito y corregido unas pocas cositas ortográficas, si ven un typo culpen a ellos. También a varios speedruners y youtubers extranjeros que se dedican a estudiar el juego de una forma mucho más técnica, que sin ellos no me sabría ni la mitad de cosas que ocultan esta maravilla de juego. De resto, me despido, suerte a todos.

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